El objetivo de este bordado es plasmar la importancia de la mujer indígena en la sociedad.
Un grato momento de encuentro tuvieron las mujeres indígenas de la comuna de Vicuña, quienes se reunieron en el terreno de la Asamblea de Pueblos Originarios, ubicado al interior del rodeo de Vicuña, con el objetivo de comenzar la confección de un bordado colectivo, para conmemorar así el Día de la Mujer Indígena, que se celebró internacionalmente el 05 de septiembre.
El Día Internacional de la Mujer Indígena recuerda a Bartolina Sisa, quien a fines del siglo XVIII murió atada a la cola de un caballo por luchar contra los españoles, transformándose en uno de los símbolos más emblemáticos de las resistencias anticoloniales de ese periodo en América Latina.
En la ocasión además se les entregó un pequeño presente a cada una con una carta cuyo primer párrafo dice: “Somos mujeres indígenas-originarias que hemos habitado históricamente en el valle de Elqui, quienes recordamos y traemos al presente también a nuestras ancestras-abuelas, testigos y parte de nuestra resistencia y fuerzas que destinamos desde los diversos roles que desempeñamos en la sociedad”, acompañado por una pequeña bandera Wiphala tejida a crochet por una mujer Quechua, presente que fue entregado a cada una, por parte del alcalde de Vicuña Rafael Vera Castillo.
Jacylin Bujes, encargada de la oficina de Interculturalidad de Vicuña comentó que la confección del mural, se consensuó la primera vez que se utilizó este terreno, cedido por la municipalidad de Vicuña a la Asamblea de Pueblos Originarios, “esta es la segunda vez que se hace uso de este terreno, en vista de lo que decidieron estas mujeres realizar acá esta conmemoración, y a través de un bordado que plasmará la importancia de la mujer indígena en la sociedad, que ese es como el discurso aunado que tienen las mujeres, un poco destacar y visibilizar lo que hacen las mujeres constantemente para reforzar sus identidades”.
En la instancia además de la participación de la Asamblea de Pueblos Originarios del Valle del Elqui, que acoge a los pueblos Diaguita, Mapuche, Coya, Atacameño, Aymara y Quechua, estuvieron presentes integrantes de la comunidad Diaguita Apus del Elki y comunidad Diaguita Vertientes del Chagual, de Nueva Talcuna.
En el mes de junio aproximadamente, se hizo entrega a la Asamblea de Pueblos Originarios del Valle del Elqui, de este lugar destinado a reunión y realización de ceremoniales. El alcalde de Vicuña Rafael Vera, destacó el uso que se está haciendo de estos espacios tan necesarios para la sociedad, un lugar donde se puede compartir, “tomaron la decisión de reunirse en este espacio que nosotros les entregamos, porque entendemos que los pueblos originarios que tenían tantos terrenos hoy día no lo tienen, en términos particulares, la mayor cantidad de la gente vive en casas pequeñas, y a partir de eso nosotros quisimos hacer un aporte, y entregamos este espacio, y hoy nos da tremenda felicidad, sentir que ellas lo están ocupando, conmemorando un día tan importante como es el día de la mujer indígena, y lo hacen como lo hacían sus ancestros, tejiendo, colaborando entre ellas, trabajando en grupos, sintiéndose un equipo”.
Paulina Zuñiga Llanquileo de origen mapuche, es la presidenta de la Asamblea de Pueblos Originarios, quien manifestó su alegría por el espacio de reunión, “es lo más genial que puede haber pasado, de tanto tiempo que ha pasado para que nos cedieran un lugar y está fantástico, porque tenemos donde podernos reunir, ya no andamos consiguiéndonos lugares, tenemos un lugar propio (…) ahora viene un taller de bioconstrucción, se va a construir acá y este espacio va a ser para nuestras ceremonias, para talleres, como un taller de medicina , para varios (cursos) se va a ocupar”.
María Chinga Araya, perteneciente al pueblo Diaguita, relató su emoción al compartir la jornada, “en este momento estamos todas compartiendo una tarde muy grata con todas nuestras hermanas, y contenta por estar celebrando el Día de la Mujer Indígena con personas de todos los pueblos: Mapuche, Diaguita, Coya, Atacameño, y en sí estamos todas contentas de estar acá”.
Este bordado colectivo ornamentará la sede comunitaria que esperan poder construir en el mediano plazo las y los integrantes de la Asamblea de Pueblos Originarios, así como también lo será para la realización de diversos talleres y ceremonias.