Guerrero Rojas es el actual director de la escuela intercultural Juan Torres Martínez de la localidad de Diaguitas, lugar donde ha desarrollado gran parte de su carrera. Trayectoria educativa que le será reconocida en el aniversario 203 de Vicuña.

La realización personal y profesional, sin duda, han sido una de las mayores satisfacciones de Jorge Gilberto Guerrero Rojas, quien llegase a la comuna de Vicuña en el año 2000 para trabajar en la escuela intercultural Juan Torres Martínez de Diaguitas, primero como docente en 1° ciclo básico, luego como profesor de lenguaje y después como jefe técnico, para el año 2014 convertirse en el director del establecimiento a través del sistema de alta dirección pública, cargo que mantiene hasta la actualidad.

Profesional egresado de la Universidad de Chile cuando estaba en La Serena, de las carreras de Pedagogía General Básica con mención en Artes Plásticas y Pedagogía en Lenguaje y Comunicación. Padre de 2 hijos y con una gran vocación por la educación y la convicción que desde allí se pueden generar grandes cambios, siendo la escuela Juan Torres Martínez uno de sus trabajos más significativos, donde se ha sentido realizado y feliz, lugar del que está pronto a despedirse, ya que se ha acogido a retiro voluntario.

En este sentido y en el marco de la celebración del aniversario 203 de Vicuña, Jorge Guerrero será reconocido por su trayectoria educativa, expresando gran emoción, ya que atesora hermosos recuerdos en su paso por la escuela de Diaguitas. Sobre esta distinción, sus inicios en la educación, su historia ligada a Vicuña y otras temáticas, se refirió en la siguiente entrevista.

En cuanto a sus inicios y su carrera profesional ¿De qué manera se desarrolló en usted el interés y vocación por la educación?

“Desde joven me gustó entregar lo que sabía a quienes tenían curiosidad por aprender. Me inicié haciendo un reemplazo en Coquimbito y posteriormente, uno debía postular a través de la secretaría y se presentó la oportunidad de Andacollo y trabajé 1 año en la escuela D-113, luego requirieron mi servicios en una escuela particular ‘Los Claretianos’ donde estuve 20 años y por diversos motivos se ampliaron mis horizontes y llegué a Vicuña y felizmente llegué a esta escuela (Juan Torres Martínez) y no me arrepiento, es donde he tenido las mejores experiencias. Han sido mayores las felicidades y los éxitos, que malos ratos”.

¿Cómo recuerda sus primeros años en la escuela Juan Torres Martínez? ¿Qué historias vienen a su mente?

“Cuando llegué recuerdo que éramos una escuela con un gran espacio físico, pero muchas falencias en los recursos para trabajar con nuestros alumnos. Afortunadamente eso fue mejorando y hoy somos una escuela que no tiene necesidades, esta escuela tiene todo lo necesario para entregar una educación al más alto nivel y los esfuerzos de todos quienes conforman está unidad educativa, han estado centrados en eso, entregar el mejor trabajo en beneficio de nuestros alumnos y de la comunidad de Diaguitas”.

Respecto a la distinción qué recibirá en el aniversario 203 de Vicuña, la que se le otorga por su trayectoria educativa en la comuna ¿Cuáles fueron sus sensaciones y emociones al momento de ser notificado por el municipio?

“Fue una sorpresa, no me lo esperaba, nunca he desarrollado mis trabajos esperando que me los reconozcan o agradezcan, sino es lo que quiero entregar de acuerdo a mis posibilidades. Esta escuela es muy particular porque el 80% está constituido por damas, de las cuales tengo la mejor opinión y ha sido una excelente experiencia trabajar con ellas. Este reconocimiento viene del fruto de su trabajo, los auxiliares, la comunidad en general y todo el grupo de profesionales que componemos esta escuela, donde he tenido el respeto, apoyo de ellos y me siento muy agradecido y siento que el reconocimiento va dirigido a cada uno de ellos”.

¿Qué va a significar para usted dejar esta escuela? En este sentido ¿Qué palabras quisiera dedicar?

“La felicidad más grande para mí sería que cualquiera que preceda a la función de dirigir esta escuela lo haga mucho mejor que yo, que corrija los errores que yo involuntariamente no pude corregir y que los éxitos que vengan sean de todos ellos, porque tenemos las condiciones, el personal profesional humano para cumplir todos los requisitos, deseos, objetivos y que se puedan cumplir ojalá, a corto plazo. Esté donde esté me sentiré feliz por los que quedan acá y las condiciones están para dar ese gran paso”.

Finalmente, ¿Qué mensaje puede entregar a toda la comunidad de la escuela Juan Torres Martínez?

“Yo estoy en un periodo de cierre de todo mi trabajo en educación, hemos construido una escuela que es única y tenemos que cuidarla, esta es la institución quizá la más importante dentro de la comunidad, entonces es el rol que tiene que cumplir el apoderado, el alumno de cuidarla, de querer engrandecerla cada día, de los profesores, asistentes de la educación, de que esta identidad que tenemos como establecimiento no se pierda, que traspase más allá de los que hemos estado en algún momento en esta escuela, es lo mejor que podríamos hacer y ese sería mi mensaje”.