La comuna de Vicuña fue la mejor evaluada en la región y ocupó uno de los dos cupos para el 2025.

La localidad de Rivadavia ha sido seleccionada por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (MINVU) para formar parte del Programa para Pequeñas Localidades (PPL), el cual tiene por objetivo mejorar el desarrollo urbano en sectores con menos de 20.000 habitantes, favoreciendo la equidad territorial, el acceso a una mejor infraestructura y calidad de vida de sus habitantes. Esta iniciativa es una ayuda sucesiva a la mejora de la comuna de Vicuña, que también es parte del Programa “Quiero mi Barrio”.

Una alegría más para la comuna elquina, que ha tenido importantes inversiones en el sector rural. Así lo destacó el Secretario Regional Ministerial del MINVU, José Manuel Peralta León, quien dio el puntapié inicial al programa, junto al Alcalde de Vicuña, Rafael Vera y las familias de Rivadavia, quienes en una reunión expresaron su satisfacción por la elección de dicha localidad del Valle de Elqui.

“Este programa nos permite instalarnos en Rivadavia durante un par de años con profesionales para conversar con las y los vecinos que inversión va a realizará el ministerio de Vivienda y urbanismo en estas localidades, son a partir de estos primeros recursos, $1.500 millones con los que vamos a hacer los sueños de los vecinos realidad”, destacó el Seremi de Vivienda y Urbanismo de la región de Coquimbo.

Asimismo, el alcalde de la comuna de Vicuña, Rafael Vera, expresó en la ocasión que «este es el primer Programa para Pequeñas Localidades que logramos para nuestra comuna, lo cual nos llena de orgullo. Nuestro equipo técnico hizo un excelente trabajo, obteniendo la mejor evaluación. Estamos agradecidos con el Seremi de Vivienda, José Manuel Peralta, y las autoridades regionales, por valorar este proyecto que es clave para nuestra comunidad”.

Semanas anteriores a esta reunión, se realizó una evaluación por las autoridades regionales, entre ellas el Delegado Presidencial de la región de Coquimbo, Galo Luna Penna, el Seremi del MINVU, y sus pares de Economía y Desarrollo Social y Familia, Pía Castillo y Eduardo Alcayaga, quienes consideraron diversos criterios para la selección de las comunas beneficiadas; entre ellos, el acceso limitado a bienes públicos, el desarrollo local y la integración social.

Luego de este proceso, Rivadavia y Combarbalá fueron las localidades seleccionadas en la región de Coquimbo para recibir los beneficios del programa, ocupando los últimos dos cupos disponibles para el año 2025.

Lo anterior fue valorado por la primera autoridad comunal. “Lo que nos tiene muy satisfechos es que fue el proyecto mejor evaluado de la región. Es una cifra muy importante que podemos multiplicar si hacemos más proyectos con estos recursos y será la comunidad quien decida como utilizar estos dineros”.

En ese contexto, el Concejal de Vicuña, Kether Gómez Pastén, destacó la importancia de esta selección y la importante inyección que beneficiará al lugar, destacado que “con una inversión de $1.500 millones, el MINVU trabajará en conjunto con la comunidad a través de mesas de trabajo, para definir las zonas más vulnerables y prioritarias de la comuna. El Ministerio aportará tanto los recursos como los profesionales, mientras que la comunidad decidirá, según sus necesidades, en qué sectores se focalizarán los esfuerzos».

El enfoque participativo del programa garantiza que los habitantes de Rivadavia jueguen un rol activo en la planificación de las mejoras, asegurando que las intervenciones respondan directamente a las necesidades locales. Así, se espera que este proceso promueva no solo el bienestar material de la localidad, sino también su cohesión social, reforzando los vínculos entre los vecinos y su sentido de pertenencia.

Josefina Álvarez, vecina del sector manifestó su emoción ante esta oportunidad de renovación. «Lo más importante es que la comunidad va a ser quien decide. Estoy feliz porque es bonito ver que nuestro pueblo se va a embellecer y crecer, algo que necesitamos hacer juntos”.

Rivadavia se caracteriza por sus ríos, cielos limpios y tranquilidad, por lo que llama la atención de turistas en tiempos de vacaciones, de esta manera, la localidad se convierte en un ejemplo de cómo los programas de desarrollo territorial pueden transformar sectores como este en espacios más atractivos, inclusivos, modernos y sostenibles, sin perder su esencia y herencia cultural.